EL BALCON DE LOLA

No soy escritora, pero me gusta coquetear con las palabras y alinearlas en cuentos e historias. Aquí quedan todos colgados en este balcón, para que tú puedas recrearlos, y yo sacar mis sombras a orearse. Lo hago sin ánimo de ofender, sin pretensiones de deslumbrar, tan sólo con la intención de compartir con quien pase a mirar y tal vez se quiera quedar.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

HUECO VACIO

    Hay días que hubiese preferido no levantarme.... o sencillamente no existir ; mejor, dejar de existir por un tiempo para evitar tanta revoltura, tanta desazón, tanta nostalgia pegajosa.
   Si pudiese desprenderrme de los recuerdos..., si al menos no vinieran impregnados de sensaciones ciegas y  con  ese dolorcito agudo y tenaz que está taladrándome un hueco enorme en algún lugar que no llego a definir.....
   Cuando era pequeña tenía una muñeca con pilas en la espalda. Si  el juego terminaba le quitaba las pilas y la pobre " Dulcita" quedaba inerme en un lugar del cajón de los juguetes. Al menos descansaba de los avatares a los que yo  la sometía. Debe ser ese espacio, el de las pilas, el agujero que me está creciendo por dentro.
    Hay días que me gustaría quitarme las pilas que me hacen sentir,  para moverme como una autómata descorazonada y no tener que soportar los recuerdos de sus  oscuros  y perversos abrazos y hacer como él , andar por la vida desposeída de piél, de alma,  de sangre en las venas y sentirme, como él  , el amo del mundo y el rey de las fiestas aún sabiéndose una Sombra gris y helada.